Cepillo dental ideal
Te desvelamos los pros y contras de ambos tipos del cepillo dental ideal para que valores todas las opciones que te ofrece tanto uno como otro.
En la actualidad, a la hora de elegir cepillo de dientes, existe una amplia gama entre la que elegir nuestro cepillo. Hay corrientes que optan más por el cepillo tradicional, defendiendo que su manejabilidad es mayor y que con él siempre vas a llegar a más zonas. Por el contrario, los adeptos al cepillo eléctrico, defienden su comodidad y rapidez en el cepillado. En este artículo vamos a desvelarte las ventajas de cada tipo para que puedas decantarte por aquel que más te convenga.
Las ventajas de los cepillos eléctricos
En primer lugar, los cepillos dentales tienen como defecto que habitualmente sus cerdas realizan el mismo movimiento. Es decir, hacia los lados o circularmente lo que reduce su área de acción. Por ello, siempre debemos buscar cepillo que realicen movimientos variados, alternando direcciones, por ello el cepillo eléctrico es una muy buena opción
Además aunque parece contradictorio el cepillo eléctrico requiere un tiempo de cepillado superior puesto que, hay que repasar diente a diente al igual que cada cara del diente. Sin embargo, los cepillos eléctricos son una gran solución para las personas que no pueden realizar un cepillado correcto por cuestiones de movilidad o para que los niños se inicien.
No obstante, el cepillo eléctrico es perfectamente usable y válido si nos resulta más cómodo, solo tenemos que tener en cuenta que será más fiable si tiene el sello de la Asociación Dental Americana ADA y que su movimiento rotatorio variado, lo que supondrá un cepillado de mayor calidad.
Las ventajas de un cepillo dental tradicional
El cepillo de dientes tradicional, suele tener la cabeza del mismo mucho más grande que la de un cepillo eléctrico (suelen ser circulares) por lo que al tener un mayor número de cerdas abarcan más a la hora del cepillado lo que aumenta el porcentaje de eliminar el 100% de la comida que se queda en nuestros dientes
Evidentemente son considerablemente más baratos que los cepillos eléctricos, son fáciles de transportar para viajes y ofrecen mejor agarre
No se descarga como uno eléctrico, mucha gente se acostumbra al movimiento del cepillo eléctrico y cuando se acaba la batería de éste o tienen que usar una convencional les cuesta adaptarse, hasta sienten rechazo. Un cepillo de dientes tradicional nunca se quedará parado en medio de un cepillado dental
Es muy difícil decantarse por uno o por otro, pero lo que es seguro es que los cepillos eléctricos son cada vez más recomendados por dentistas especialistas tanto para niños como para adultos, así que la decisión como siempre está en vuestras manos. Eso sí, tanto si usas cepillo eléctrico como convencional es recomendable que cuente con un raspador lingual, esto nos permitirá eliminar también los gérmenes de la lengua, mejorando también nuestro aliento y evitando todo tipo de bacterias
Artículo publicado el martes 4 de agosto de 2015
Etiquetas: Higiene bucal